Jueves 7 de Enero.
Ayer jueves 7 estuve en la Sierra de Guadarrama, las noticias del día 6 eran un tanto halagüeñas, según webs y grupos a los que sigo habían caído los primeros copos serios en nuestra sierra. Incluso acceso a Cotos con cadenas por nevadas.
Ansioso por pisar nieve en la zona centro, me dirigí al Puerto de Cotos, topándome con la cruda realidad de inicios de mes de Enero de este 2016, ya las temperaturas en Navacerrada pueblo a las 8:30 de la mañana eran de 7ºC, cosa bastante anormal.
Ente la niebla ascendí al Puerto de Navacerrada comprobando que ni en el pueblo, ni en el Ventorrillo, ni tan siquiera a la altura de la Fuente de los Geólogos existía un gramo del elemento blanco.
Continué mi cruzada hasta el Puerto de Navacerrada, algo de nieve residual y 4ºC a las 8:45 con bastante niebla húmeda.
El camino por carretera hasta el Puerto de Cotos fue más bien de asombro al no ver tampoco nieve ni en lugares típicos de acumulación como la ladera norte de la Bola.
Ante mi asombro llegué a Cotos, no tardé mucho tiempo en enviar dichas condiciones nivológicas a mis compañeros de afición, mientras me preparaba para hacer una rutita tranquila, más bien terapeútica-emocional.
La visión de la Norte de Cabezas desde el Puerto de Cotos.
Por la pista principal fui rumbo a la laguna, el viento agitaba los pinos de valsaín y la pista más bien albergaba hielo acuoso, que nieve dura.
El Puerto de Morcuera con similares condiciones, en la Cuerda Larga, menos nieve si cabe.
Fui recorriendo el típico camino hacia la laguna comprobando el estado del mismo, eso sí el viento soplaba bastante desde aquella dirección (Oeste).
Me crucé con varias personas que bajaban de la zona de las Lagunas de los Pájaros, bastante alteradas por el fuerte viento, se habían dado la vuelta.
Con intenciones exploratorias más bien continué hacia 5 lagunas, apreciando que había algo más de nieve, eso sí las lluvias posteriores a la nevada habían convertido la misma en nieve papa, metiéndome en todos los charcos posibles y testando el material nuevo.
Desde aquí comenzó a llover, (lo que faltaba), La lluvia de Oeste me empapó por completo antes de llegar a la Laguna de los Pájaros, eso sí, por lo menos toda esta zona norte alberga unos 30 centímetros de nieve, lo único un poco aceptable de la sierra.
Zona por la que me encargué de abrir huella hasta el inicio de la cresta hacia claveles.
Más por cabezonería continúe por la cuerda. Vientos fortísimos que me hacían perder el equilibrio y caminar entre rocas con una capa de nieve blanda.
En mis 15 años de montaña no había visto nunca ésto antes en Guadarrama, posteriormente me enteré que estábamos en alerta naranja por vientos de más de 100 Km/h en la sierra. Pues me lo comí todos.
Zona de claveles.
Llegué a la zona de Claveles como pude y lo de ir por arriba "ni de coña", fui recorriendo por la vertiente segoviana la parte baja de la cresta a capricho del viento, y caminando sólo cuando a éste le daba la gana.
Por fin llegué al pequeño collado que hay entre Claveles y Peñalara, el viento hacía efecto embudo y era la zona con más virulencia, me costó bastante mantener el equilibrio los escasos 20 metros hasta llegar a cobijo de unas rocas.
Un poquito más y llegué al vértice geodésico. Ni foto, ni nada, me atrincheré tumbado en el pequeño vivac junto a cumbre, saqué el GPS, bebí agua, una barrita, me cambié de guantes y para abajo. No había huella alguna de la presencia del hombre durante aquella jornada allí arriba.
No le quité el ojo al GPS, a sabiendas de que esta zona si andas despistado es peligrosa y puedes acabar tranquilamente en La Granja.
La nieve desapareció por completo en la parte alta y comencé a ver la senda embarrada que recorre la zona de Dos Hermanas, el viento me hacía parar por momentos, otros continuaba, y así fui saliendo de aquella locura de viento, que me hacía pitar los oídos, no me dejaba ver con las gafas, me volaba la capucha del gore y torcía el gorro.
Tras pasar la famosa barrera vi alguna huella, este era el lugar de los valientes que habían dado la vuelta tras intentar subir por la normal. Ya la cosa cambió, el viento agitaba los pequeños pinos, pero ya era soportable y tranquilamente fui deshaciendo los pasos rumbo al Puerto de Navacerrada.
Me quité la capucha y las nubes se quedaron arriba, dejó de llover y el gore y pantalones se secaron en pocos minutos.
Siete Picos, Montón de Trigo
El día por abajo había mejorado algo, y nuevamente vi la realidad serrana, Siete Picos y Valdesquí sin gota de nieve.
Valdesquí.
Me crucé con alguna persona, incluido un grupo de japoneses y familias por la zona baja de Cotos.
Lugar de vuelta a la realidad humana.
Un tanto destemplado no bajé ni al coche, me metí en Venta Marcelino y mientras me entonaba con un bocadillo y el fuego de la chimenea escuchaba a la muchacha contarme la historia de la antigua cantina nacida por 1930 de manos de Marcelino un tío segoviano casado con una lugareña de Rascafría.
ah!! también me dijo: -"sabes que hoy estamos en alerta naranja por vientos de 110 Km/h"-
En definitiva:
Condiciones de temperatura como en Octubre.
Cantidad de nieve como Noviembre
Calidad de nieve como en Mayo
No hay comentarios:
Publicar un comentario