jueves, 19 de junio de 2014

Gran Diedro del Torozo ( Vº+, 290mts.)

Parece que tras un inicio de temporada un tanto dubitativo y alejado de la exposición y "patios" de la escalada clásica bajo el ala de la escalada de bloque en sala, volvía a coger la forma en esta especialidad.
  
Hablo de forma cuando me refiero a ir mirando por donde subir y no por donde puedes caer, ese cambio de perspectiva creo que es el que te hace disfrutar y no sufrir de una escalada clásica a la que no aspiro nunca a llegar a abrir un 6c, ni tan siquiera un 6b, pero sí llegar a cimas a las que no podrías subir con otros medios.

La festividad del corpus en la Comunidad de Madrid llegó como un balón de oxígeno en el calendario. Necesitábamos monte, necesitábamos escalada y necesitábamos un vivac con vistas a las estrellas.

La idea cuajó bastante rápido, el Torozo era una zona que nos apetecía y que aún no habíamos probado, desde el año pasado la teníamos entre ceja y ceja y podía ser la zona perfecta para salir el Miércoles tarde de la urbe dormir por la zona y el Jueves fiesta realizar la escalada.
En cuanto a sus vías de ascenso, el Gran Diedro no puede faltar en el "currículum" de todo escalador clásico centro y para conocer la zona, la mejor opción y más clásica.


Partimos el Miércoles desde Parla, en el coche Juanjo, Paquito y yo. Tres personas, un número que para una clásica sin necesidad de prisa y con grado asequible me gusta. Además Paquito volvía a hacer clásica un tiempo después, esta vez iba de paquete agradecido. Agradecidos nosotros que fue el primero que me metió por la vena esto de la escalada clásica y que se dignó a subirme por el Espolón Manolín hace unos tres años en mi primera escalada.

A las 20:30 llegamos a Cuevas del Valle, un paseo por las callejuelas con esencia a arquitectura rural "surgredensi" y entre los tejados del pueblo el Torozo se levanta altivo.


Buscamos un bar donde cenar un bocadillo mientras vemos la debacle de España en el mundial de fútbol y cuando terminamos cogemos el coche y nos subimos al Puerto del Pico a dormir, estábamos solos en el aparcamiento, ninguna nube y viento nulo. Una buena noche en definitiva.

A sabiendas de la festividad en algunas provincias, nos propusimos madrugar bastante con la intención de entrar primeros en el "Gran Diedro" y evitar aglomeraciones (aunque finalmente fuimos los únicos que hicimos la vía). Además el calor en estos días estaba pegando fuerte por lo que madrugar nos iba a beneficiar para la escalada.
A las 6:15 minutos nos levantamos en el puerto, hacía una temperatura agradable, unos 15ºC y desayunamos plácidamente antes de guardar las cosas en el coche y hacer la mochila para subir a pie de vía.


APROXIMACIÓN:
Desde el Puerto del Pico, descendimos por la N-520 hacia el Sur unos 500 metros para dejar el coche en una curva de la carretera antigua junto a un puente de piedra de un pequeño barranco.



Nos cargamos las mochilas y comenzamos a ascender entre matorrales, tratando de seguir unos hitos en dirección al Este sin llegar a cruzar nunca el barranco. De un inicio el camino resulta algo penoso por lo poco indicado, la pendiente y la vegetación, pero poco a poco la cosa va aclarando, van apareciendo algunos hitos y la pendiente se va suavizando a la vez que comenzamos a ver las primeras paredes de la Albujea.

A los 15-20 minutos los hitos nos llevan al mismo camino que viene del Puerto del Pico, éste está más marcado y ya se convierte en una amplia senda que mantiene altura en busca de las paredes orientadas al Sur del Torozo y que ya vemos en la lejanía.


Nos maravilla la zona, hay muchas posibilidades de escalada y no nos extraña que te tenga buena fama entre los escaladores. Continuamos por la senda que a veces baja un poco y otras sube, atravesamos una zona de placas y ya podemos ver la base de la vía e incluso el marcado diedro que surca la pared, el itinerario de aproximación es muy evidente.

En el último tramo hay que volver a subir desnivel para llegar a pie de vía, la referencia es un árbol bastante grande hacia el que nos dirigimos y cuando estamos próximos y situados bajo las paredes del diedro hay una característica roca grande a la que hay que buscarle la espalda por una pequeña trepada. Ese es el inicio, (50 minutos de aproximación).


ESCALADA:
Nos situamos los tres tras la roca, allí dejamos las mochilas y comenzamos a sacar utensilios de escalada, Paquito dice que no va a abrir ningún largo y prefiere ir de paquete, así que nos repartiremos los largos entre Juanjo y yo. Le toca comenzar a Juanjo porque yo inicié la última vía que hicimos,  pero me pide hacer el 4º con el Diedro, así que cambiamos las tornas; yo haré 1º, 3º y 5º y él 2º y 4º. -¡apañados!.

LARGO 1, (IVº, 40 metros):
Descripción:
Se trata de un largo inicial asequible, asciende por un sistema de fisuras muy protegibles, hay gente que lo realiza por las placas de la derecha, pero no hay donde proteger. Dicha fisura nos llevará directamente hasta una corta chimenea y un diedro que da a la reunión situada en una repisa. No tiene pérdida a pesar de leer en varios lugares que es perdedor, el diedro de los largos 3 y 4 evidencian que el inicio es allí, no hay otra opción si se sabe leer la roca.

Crónica:
Ataviado con cacharros para hacer "la Nose" en Yosemite inicio el largo, puedo subir por unas plaquitas tendidas, pero prefiero hacerlo algún metro a la izquierda por unas fisuras, puedo meter alguna cosilla pero lo evito hasta coger buena altura, es terreno fácil y no quiero que me rocen las cuerdas.


También había escuchado que es una zona un tanto sucia de vegetación pero no lo veo así, la piedra está limpia y adhiere muy bien, algunos matorrales nacen en las fisuras más grandes pero algo normal como en cualquier otro lugar.
Tras ascender por varias fisuras llego a una pequeña chimenea con vegetación, la asciendo por dentro y me encuentro con un bonito diedro, la reunión está encima, la puedo ver e incluso puedo evitar el diedro por la derecha por tramo de adherencia, pero yo soy más de canto y el diedro tiene buenas manos, así que para arriba unos metros hasta la reunión, hecha con unas curiosas argollas negras con goma.


Monto la reunión y mis compañeros ascienden uno por cuerda con bastante buen humor y comentando la jugada del primer largo. 4 han sido los seguros empleados en los primeros 40 metros, ésto dice mucho de la dificultad.


Ya estamos todos en casa, el cielo continúa un tanto encapotado, incluso Paco y yo vamos con manga larga, la temperatura es perfecta, vamos a por el siguiente.

LARGO 2, (IVº+, 25 metros):
Descripción: Por encima de la reunión aparece una placa con dos chapas, se inclina un poco en su salida y tras un corto tramo se llega a la siguiente reunión antes de la fisura tumbada. Fácil y de trámite para llegar a los dos siguientes largos desde una buena posición.

Crónica: Cambiamos el material y ahora se dispone a abrir Juanjo, por encima ya podemos ver más cerca el Gran Diedro que da nombre a la vía, en realidad son dos diedros divididos por un tramo de bloques. Al igual que el largo anterior el itinerario es evidente, se puede hacer por la placa que tiene dos chapas o por una fisura un poco más a la izquierda que te lleva al mismo lado.
Esta vez Juanjo tira por la placa.



Asciende sin problemas y chapa los dos seguros fijos, la salida se inclina un poco más y prefiere dirigirse un par de metros a la izquierda para poner otro seguro flotante y salir por arriba a una buena terraza.


Por un momento nos pregunta si continúa un poco más, pero el diedro del siguiente pertenece al 3º y se trata del más largo con 50 metros así que no va a encontrar reunión intermedia y decide aunque la puede improvisar, mejor hacer los largos como están reseñados.
Así que monta la reunión y nos asegura a los dos, Paco escala la placa y yo me voy a la izquierda para quitar el seguro que tiene mi cuerda. Pronto llegamos al a reunión y nos juntamos de nuevo.



LARGO 3, (Vº, 50 metros):
Descripción: Dicho largo se inicia por la izquierda de la reunión, se trata de un diedro tumbado que lo acompaña una fisura para proteger hasta arriba. Después se llega a una zona fácil hasta situarse bajo un gran bloque que se escala por una chimenea a la izquierda para llegar a la terraza donde se encuentra la reunión con dos clavos.

Crónica: Comienza un poco la parte bonita, los largos de los diedros y me toca a mí salir. La parte inicial es de las apetecibles con protección total a lo largo de los primeros 10 metros.
Pronto coloco el primer seguro y asciendo por el diedro, con rapidez, voy ganando metros y bloqueando con las manos, voy a gusto y hasta tal punto que salgo de la primera parte sin colocar un segundo seguro a pesar de las peticiones de mis compañeros a que lo hiciera.


Termina el diedro y meto el segundo, saliendo por la parte izquierda ya por terreno más fácil por donde continúo ascendiendo. Llego a una terraza situada ante un pequeño muro más vertical, aquí se puede montar una reunión opcional tras los primeros 30 metros, pero es preferible montarla bajo el diedro del siguiente largo, zona en donde puedes ver al compañero.
Ahora por una estrecha chimenea continuo el ascenso, por el interior hay buenas manos a pesar de ponerse la cosa un poco vertical y se puede asegurar bien para llegar a la siguiente terraza bajo el diedro donde monto la reunión.


Dos clavos la componen y un fisurero ayuda a uno de ellos pero tiene una cinta con un ángulo de más de 120º, así que meto un friend y la re-triangulo con cintas propias que forman ángulos más cerrados y comienzo a asegurar a los compañeros.
Tiene buen ambiente el lugar y ya comienza a subir la temperatura, por encima el bonito diedro vertical y por abajo mis compañeros a los que voy recuperando cuerda poco a poco, hasta que llegan a mi posición.


LARGO 4, ( Vº+, 40 metros ):
Descripción: Es el largo estrella de la vía, un diedro con cositas, escalones y fisurillas donde divertirse protegiendo y una buena verticalidad. Al final del mismo el paso difícil es salirse a la placa de la derecha para terminar, pero se puede hacer continuando un poco más arriba y evitar el paso a la placa. Realmente son 25 metros, pero nosotros lo alargamos ascendiendo hasta situarnos bajo los techos y haciendo la travesía hasta la terraza donde montamos la reunión con 40 metros.

Crónica: Nuevamente Juanjo toma las riendas, los dos cabos de la cuerda y todos los seguros. Va a comenzar el 4º largo, el más difícil y bonito. Desde debajo tiene una pinta perfecta, además se ven cosillas para progresar a diferencia de lo que parecía desde más abajo.
Chocamos las manos como "ritual de Paco" e inicia la escalada; el diedro comienza un tanto escalonado, se puede parar bien a proteger y pronto va ganando altura.


Una laja a la izquierda asciende paralela unos cuantos metros, un lugar perfecto para proteger con seguros. Poco a poco, despacio pero con confianza va subiendo. 


Asegura a derechas, a izquierdas, todo va fenomenal. Hay un descansillo justo antes de que el diedro se desconfigura con la salida, te escupe hacia afuera un poco y se pierden las buenas manos.


Hay un "clavo artesano" si se puede llamar así, ya que es una cuña de hierro oxidado con un alambre cogido, también lo usamos por si acaso y es que todo vale.


Tras esta parte donde se supera con un poco de fuerza y sacando la pierna hacia la parte izquierda del diedro, se llega al final del mismo. De la fisura hay que pasar a una placa un poco inclinada, supuestamente éste es el paso del largo.

Allí debería haber una reunión pero solo existen dos agujeros de la antigua reunión que alguno se ha encargado de quitar. Así que Juanjo decide continuar bajo los techos y realizar la travesía hacia la izquierda en busca de una cómoda plataforma pasados los mismos. Allí monta la reunión con seguros flotantes.

Cuando nos da el ok, parte Paco y detrás yo, le voy a dejar unos cuantos metros ya que una caída en el diedro tiene toda la pinta de que puede tirar al otro si va muy cerca, así que le voy a dejar unos 10 metros.

Sale y hasta que no le veo desaparecer por arriba no parto yo. Muy interesante la subida y la progresión, hay mucho canto para ir subiendo, muy bonito también, pasos de colocarse y mucho ambiente en el primer tramo. Antes de llegar a la pequeña panza cojo aire en una terraza donde veo algo que se mueve. ¡un ratón de campo aquí!, esto es alucinante, se nutrirá de los restos de barritas energéticas de los escaladores. Unas fotos al ratón y continúo por el tramo más vertical. Ésto ya es otra cosa, las manos son peores y te obliga a sacar los pies a la fisura lateral con canto, bonito, bonito.

Tras superar el paso, supuestamente viene el paso más difícil. Pero veo que puedo seguir ascendiendo usando el filo de la fisura que cierra el diedro hasta una zarza, realmente he dejado atrás la parte expuesta de la placa y no he tenido que tirar de adherencia, ni salirme hasta el final.

Por encima veo los techos y a la izquierda mis compañeros en la reunión improvisada


La travesía también tiene su ambiente, aunque no es lo que parece ya que tiene buenas manos y pies para ir ascendiendo hasta la terraza donde están mis compañeros, que están más bien de cachondeo.


Nos juntamos de nuevo los tres, y ya poco más tiene que quedar de vía, ya que Juanjo se ha comido buena parte del quinto largo. Paco duda como en alguna reunión de más abajo, comenta que se anima a abrir, que sino, que si sí, que si tal, al final nada y me toca a mí de nuevo terminar el 5º y después ver lo que hay por arriba, ya que hay gente que te recomienda subir en ensamble, otros a largos y otros con la cuerda al hombro.
LARGO 5, (IVº, 55 metros):
Descripción: Desde la terraza bajo los techos se sale un poco a izquierdas buscando la zona fácil, un pequeño muro fácil IVº y sólo nos quedará ir superando terrazas por terreno sin dificultad alguna IIIº. Creo que la reunión se sitúa a la derecha según se va ascendiendo. Nosotros tiramos toda la longitud de la cuerda en la vertical hasta montar reunión con seguros propios.

Crónica: Comienzo yo el largo, salgo por la parte izquierda de la reunión, hay una serie de terrazas que me llevan hasta un pequeño muro bastante asegurable, meto un seguro y continúo, la pendiente ya aminora y parece que el resto son gradas tumbadas con terrazas. Puedo ir por la derecha, izquierda o de frente, así que voy buscando la zona de roca menos descompuesta hasta llegar a un murete a la izquierda donde hay fisuras para montar reunión.

Ya esta todo montado y aseguro a mis compañeros que sin problemas llegan a la reunión, 3 o 4 seguros en toda la tirada.



En la reunión valoramos como continuar hacia arriba, sabemos que nos quedan unos 80 metros y que son de  IIIº, cosa fácil pero no te puedes caer. Finalmente echamos las cuerdas al hombro y tiramos para arriba trepando por una serie de gradas que ni siquiera llegan a ese grado. Muy fácil.


Siempre tiramos hacia arriba, buscando la depresión de la roca, y en menos de 10 minutos llegamos al bloque cimero. Al otro lado está el Torozo Norte, más alto y a la izquierda la Albujea. Por el Sur unos cuantos pueblos salpicados en todo el valle.


Comemos una barrita energética y bebemos un poco de agua, la escalada quizás nos haya sabido a poco, al fin y al cabo han sido cinco largos como en La Cabrera, una distancia que estamos acostumbrados, pero la verdad que muy bonita vía.

DESCENSO:


Según las reseñas hay que comenzar el descenso hacia el Norte, primero por unos bloques y al poco por unas placas de IIIº. Nosotros iniciamos la bajada en dirección a la Albujea, a los pocos metros llegamos a dichas placas, son fáciles pero no te escurras. Vamos buscando las fisuras y bañeras para ir perdiendo altura y llegar al callejón que forma el Torozo Sur con el Torozo Norte.


Nos quitamos los pies de gato y con las zapatillas vamos a continuar el descenso hacia el Oeste, ahora tomaremos la canal que separa el Torozo Sur con la Albujea, son unos cuantos metros de descenso siguiendo hitos por restos de una senda que nos van acercando a la pared Sur de la Albujea donde vemos algunos escaladores.


Terminamos de perder toda la altura necesaria para salir al camino de ascenso a pie de vía y lo tomamos ahora en ascenso en busca de nuestras mochilas. Desde aquí abajo la pared se ve bonita, se ve grande, quizás aparenta más de lo que luego esconde.


Llegamos a pie de vía, hay más personas escalando y podemos contabilizar 5 o 6 cordadas por las diferentes vías de la pared. Es todo un descubrimiento para nosotros esta zona hay infinidad de vías en altura, frescas para el verano y placas y diedros para elegir.

VOLVEREMOS!!!!.

1 comentario:

  1. Hey!! yo anduve por el Torozo y escalé esa vía; fueron unos días en los que también escalamos el Espolón Manolín y la Guirles -Marchal en el Villarejo. Otros compañeros escalarón una paralela al Diedro, llamada Gollum, que tiene muy buena pinta. Intentamos escalar en la Albujea, sin croquis no nada, por donde vinoa alguna chapa y claro...nos tuvimos que bajar.

    Saludos y hasta otra.

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