sábado, 12 de julio de 2014

Aproximación a la Peña Santa de Castilla (parte 1)

Peña Santa de Castilla, ¿qué decir de esta montaña?.
Ubicada en el Macizo Occidental de los Picos de Europa y en la Provincia de León, con sus casi 2.600 metros de altitud se trata de la montaña más alta de toda Castilla y mira que "ancha es Castilla".
También es la más alta de su macizo y sólo una decena de montañas del Macizo Central la superan en cuanto altura y estamos hablando de tan sólo 65 metros más.


Para todo amante de la montaña y "coleccionista de cumbres" se trata de una de las imprescindibles, pero esconde en su interior dificultades técnicas como para ser una montaña difícil de ascender.
Las aproximaciones hasta su base son largas; hablamos de 3 a 4 horas desde los pueblos leoneses  (Valdeón, Sajambre o Caín) y del mismo tiempo aproximadamente desde los Lagos de Covadonga por la vertiente asturiana.
Su denominada vía normal o Canal Estrecha acumula varios pasos de IIIº, le siguen en cuanto a dificultad la Canal Ancha o la del Ojal con IVº en roca, todas ellas por la Vertiente Norte.

Tampoco ayuda mucho el habitual clima cantábrico de lluvias y nieblas que debido a la influencia oceánica te puede cambiar en pocas horas por completo.

Mi relación personal con la peña:

Mi primer intento de ascenso fue en Mayo del 2007, dos meses antes de ir a los Alpes, formamos un buen grupo y entramos por Vegaredonda pero la nieve blanda y las temperaturas altas nos hicieron penar de sobremanera, aún así y tras 6 horas de aproximación llegamos al primer resalte de la Canal Estrecha. No teníamos tiempo material para ascender y descender y nos dimos la vuelta.


El segundo intento fue en Abril del 2010, esta vez fue con Juankar, cargamos con todo en la espalda con la idea de acampar en el Jou Santu y así acometer con tranquilidad la escalada en una segunda jornada, pero la densa niebla, la nieve blanda y el orbayu nos caló por completo. Nos dimos la vuelta a la altura del Jou de los Asturianos con la moral por los suelos. Nuevamente "la Peña" había podido conmigo.


Con esta montaña siempre en la agenda, tenía claro que el siguiente intento iba a ser en invierno, febrero o marzo me parecía buena fecha, pero ya se sabe los fines de semana son pocos y la Cordillera Cantábrica tiene un tiempo tan irregular.

Fue pasando algún año y con la montaña siempre en la retina, comienzo a practicar la escalada clásica, ésto me abre un abanico de cumbres y de nuevas vías de ascenso con las que antes no contaba. Vamos cogiendo experiencia en vías largas y así aparece como posibilidad una de las clásicas de España la cara sur de la Peña Santa de Castilla y en concreto su Vía Sur Directa.


Planificación:

Septiembre es un mes que me gusta para escalar en los Picos de Europa y así lo demuestran sendas escaladas en el "Urriellu" durante 2012 y 2013 con tiempo estable, así que para este año planificamos el ascenso a la Peña Santa de Castilla.

Ahora en Julio nos vamos a la Cresta de Salenques en el Pirineo Oscense y en plena planificación, durante la misma semana la meteorología no es buena. Para hacer una actividad de este tipo el tiempo tiene que ser anticiclónico o por lo menos sin posibilidad de lluvia, cosa que no nos asegura el Pirineo. A última hora y con los croquis y reseñas impresos, el mismo Jueves decidimos cambiar el rumbo: en Septiembre intentaremos la Salenques y ahora nos vamos para León a la Peña Santa.

El cambio puede parecer un tanto precipitado, pero es nuestro "modus operandi", de algo tendría que servir vivir en el centro de la península, podemos elegir Norte, Sur, Este u Oeste hasta el último momento.

Arranca el viaje:
Viernes 18
Salimos por la autovía de Burgos, por lo tanto tras currar la jornada laboral salgo directamente y recojo a Juanjo en Velilla de San Antonio  para partir a tierras leonesas pronto. No tardamos mucho en llegar a la comarca y paramos en Guardo a comprar alguna cosa que se nos ha olvidado, como la tarjeta de memoria de la cámara de Juanjo. Tomamos algo allí y continuamos el camino hacia los valles astur-leoneses.

Pasamos Velilla del Río Carrión, Boca de Huérgano y después Riaño. Finalmente comemos un bocadillo entre la niebla del Puerto de Panderruedas y descendemos a ................... Valdeón?.
Damos una vuelta por las cuatro calles de Posada de Valdeón y aquello no nos cuadra, el gps ha perdido señal y en el mapa que llevamos falta la hoja justo de la zona.  ¡ joder !, esto no me cuadra y teníamos que pasar por el Puerto del Pontón para llegar a Sajambre, me temo que nos hemos pasado el desvío y para colmo se nos ha encendido la reserva del coche.
¡ Houston, Houston, tenemos un problema!. Encendemos de nuevo el gps y observamos que nos hemos dejado el desvío atrás, así que de nuevo a subir el Puerto de Panderruedas y ya tomando el desvió correcto hacia Cangas de Onís pasar esta vez sí el Puerto del Pontón y descender hacia el pueblo de Oseja de Sajambre, encima Soto de Sajambre nuestro destino está 4 kilómetros más allá por una carretera de montaña serpenteante.
Con la reserva encendida del coche, aparcamos en el parking de la entrada del pueblo  y quitamos el contacto, de aquí no moveremos el coche hasta el Lunes y para volver lo haremos por Cangas de Onís que es todo bajada. Rezaremos para que nos llegué para recorrer los 30 kilómetros que hay hasta allí.

Para relajarnos un poco paseamos por Soto de Sajambre y cuando cae la noche tomamos un café en el bar del pueblo. El dueño nos comenta que podemos subir con el coche por la pista unos 8 kilómetros hasta casi el Refugio de Vegavaño y ahorrarnos la aproximación, pero no tenemos gasolina y si subimos hasta la Vega de Avaño, ahora si que veo imposible llegar el lunes a Cangas de Onís.  Por lo tanto aproximación "a patita" hasta Vega Huerta desde el propio pueblo de Soto.

Nos vamos de nuevo al aparcamiento y vivaqueamos junto al coche, con la vista puesta en las estrellas y respirando cada bocanada de naturaleza húmeda del Norte. Esto si que es una terapia anti-estrés.

Sábado 19
Amanece en Soto de Sajambre, el olor de la vegetación de la cantábrica es inconfundible. Desayunamos junto al coche y hacemos los dos mochilones que vamos a subir, llevamos cosas para tres días.


Cuarto de hora antes de las 9 partimos desde el aparcamiento atravesando la población leonesa y en lugar de tomar la pista que asciende hacia la Vega de Avaño, tras cruzar un puente cogemos un camino junto a una fuente con dos caños y un gran castaño.
El camino asciende entre vallas de piedra y pequeñas parcelas agrícolas, dejando pronto la población atrás e introduciéndose en un bonito bosque. En cuanto ganamos el bosque el camino se ensancha y se convierte prácticamente en una pista para todo terrenos. Nos rodean hayedos y no hace el calor que esperábamos, debe estar soplando aire porque la humedad típica de picos no se hace notar como en otras ocasiones.


Ascendemos con tranquilidad por la pista que va ganando altura lentamente, cruzamos el seco cauce del Aigüera y ahora con más giros la pista gana pendiente hasta salir a la pista principal por la que suben los vehículos, una hora después de nuestra partida.
Observamos que la pista está en muy buen estado y lamentamos no poder haber subido con el coche por el tema de la gasolina, pero eso ya es otra historia.
Por la pista principal caminando en unos minutos llegamos al aparcamiento donde hay varios vehículos,


y continuamos hacia arriba en busca de la Vega de Avaño que tiene que estar ya cerca. Unos 10 minutos más allá llegamos a la entrada de la misma.


El paisaje es precioso, se trata de una gran campa de hierba con vacas y caballos, salpicada por algunas construcciones para labores ganaderas y rodeada de densos y bonitos hayedos. Además ya podemos ver al fondo sobresalir las montañas calizas y sobre todo la inconfundible silueta de Peña Santa de Castilla.


Esperábamos encontrar allí mismo el Refugio de Vegavaño, pero no es así, tenemos el GPS apagado en la mochila y sólo lo usaremos para tareas de emergencia, mientras tanto vamos tirando de mapa de alpina.
Desde el inicio de la vega y en lugar de cruzar todo el prado, tomamos la pista que sale a la derecha, bordeando todo el prado por la sombra para llegar al refugio en 1:30 horas desde Soto de Sajambre.

Como tenemos toda la jornada para llegar a Vega Huerta, nos relajamos y vamos a hacer la primera parada para tomarnos algo mientras disfrutamos de las vistas.


Una cervecita y algo de picoteo, tras el descanso iniciamos la marcha desde el refugio, no vemos señales muy evidentes de la continuación y tomamos una senda marcada con hitos que cruza el arroyo de Truégano, sobre mapa vemos que el camino parte tras el refugio.
La senda se introduce en un nuevo hayedo y los hitos son numerosos.


Ganamos altura de inicio y posteriormente vamos mantendiéndola extrañamente sin cruzar el esperado cauce del Río Dobra y sí múltiples arroyos, pero no prestamos mayor atención ya que vamos siguiendo hitos.

Tras cruzar un gran prado, llegamos a un amplio collado, desde allí avistamos el Valle de Valdeón y sus pueblos más abajo, esto me extraña ya que el camino transcurre por la vertiente norte y opto por encender el GPS.


Esperamos su ubicación y nos damos cuenta del error que hemos cometido, tomando el camino equivocado desde el Refugio de Vegavaño, estamos en el Collado Escobaloso y hemos tomado una variante del camino que nos pasa por varios collados, bordeando el Pico del Abedular. Nos extraña mucho porque no habíamos visto otro camino desde el refugio pero tampoco preguntamos, así que a la vuelta nos daremos cuenta de nuestro error.

Ahora sólo nos queda continuar el camino que enlaza con el bueno un poco más arriba, eso sí con algún kilómetro extra en el cuerpo.

La senda que llevamos mantiene altura por la vertiente Sur de la línea de cumbres y la vegetación es propia de esta vertiente, helechos, retamas y más calvas de vegetación que en la opuesta.
Al fin salimos a un cruce de caminos, desde aquí parte en que va a Posada y un poco más arriba el que debíamos de haber tomado. Ascendemos por terreno vertical sin senda al Collado del Frade, por allí pasan algunos escaladores con los que hablamos, "y es que por aquí pasa mucho machaca". (Cordada catalana/navarra. Tres vías en tres días a la Sur de Peña Santa, y vías de las buenas de las de 6c, con malas condiciones de tiempo).

Hemos salido al camino correcto y todo ello tras 4 horas desde nuestra salida de Soto, eso sí con un par de paradas largas por el camino y el extravío incluído. Ahora tomamos desde el collado una estrecha senda de tierra que surca el prado y gana altura con brusquedad trazando zetas hacia las paredes de la parte más Occidental de Torre Bermeja, paredes que la niebla nos oculta por completo.


Estamos intentando buscar la hendidura que forma en el farallón de roca la Canal del Perro y que curiosamente nos acompaña un mastín, ¡vaya, es su canal!


El mundo de roca se impone al vegetal, y nos introducimos en la Canal del Perro, con la niebla se ve más bien poco, pero la senda está muy marcada y vamos ascendiendo los tramos con mayor inclinación de la jornada..


Vamos saliendo de la canal y por arriba se abren claros, la pendiente aminora y el terreno también se hace más compacto, podemos ver al final de la pendiente el Collado del Burro.


Tras la 5ª hora tranquila de marcha llegamos al collado, desde allí esperábamos ver por fin la pared de "la peña", pero la niebla la cubre por completo, así que continuamos por terreno kárstico, llaneando en busca de Vega Huerta, sólo nos queda este fabuloso laberinto calizo para llegar.


La zona kárstica es entretenida, giros a derecha, izquierda, simas por un lado por otro jous, el macizo central a la derecha y la pared que sigue sin mostrarse.
A la izquierda de las Torres de Cotalbín podemos ver el acceso a Vega Huerta, está ya al llegar y tras la travesía por fin pisamos terreno llano que desciende a la vega, donde en su parte alta se encuentra el refugio que ya podemos ver.

En el prado hay algunas vacas y está todo bastante encharcado, hay nieve cerca y el abrevadero tiene agua corriente en forma de fuente, además el refugio restaurado está muy bien, sólo 6 plazas, con mesa y bancos, ¡un lugar perfecto para pasar unos días!.


Nos instalamos en el refugio tras 6 horas que hemos tardado en llegar, mucho contando que lo usual son 4, pero la prisa manda y en este caso era poca. Podemos ver la majestuosa pared Sur ya sin nubes y alucinamos con el lugar.

Son las 16:00 así que tenemos toda la tarde para ver la progresión de los compañeros gallegos que han iniciado su escalada por la Sur directa y que dormirán en el nevero colgado.


Además nos acompañan una pareja de holandesas y otra de recién casados ingleses. Es curioso que un lugar perdido a unas cuantas horas de los pueblos, sea el paso de algunos grupos más de montañeros que realizan el Anillo Vindio u otras circulares.

Disfrutamos con los paisajes de la vega


y junto al heterogéneo grupo nos asomamos a ver el bonito atardecer que sobre un mar de nubes muestra el Canto Cabronero como una isla.


Mañana puede ser un día grande, parece que el tiempo nos va a respetar y estamos en la línea de salida para afrontar una buena escalada, pero hay que ser metódicos ya que son muchos largos de escalada y un descenso enrevesado. Por la tarde puede que el tiempo cambie y esperamos estar ya abajo.

Continuación:
http://pelegrinajes.blogspot.com.es/2014/08/via-sur-directa-la-pena-santa-de.html






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